jueves, 4 de enero de 2018

Anticipo de El castillo de Rouen



La luz se paraba sobre los cuerpos.
Era hermoso verla caer sobre las formas.
Sí, a veces cambiaba de dirección al tocar las piedras,
los brazos, el pelo.
Recuerdo lo que el sol hacía con los bordes.
Qué acontecimiento respetar la luz. 
Así se hace una celebración, pensé.
Fue la primera vez,
fuera de una habitación negra. 




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